Una lección..♥

Autora:Akemi-chan

Pareja: Yamachii

Nota:Este fic no estaba premeditado ._. simplemente se me ocurrió y solo fluyó por asi decirlo xD...el título esta soso -w- si se me ocurre otro lo cambio :3 ...bueno espero les guste

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Escondido detrás de unos arbustos un peli castaño joven observaba a un par de amigos que se encontraba a pocos centímetros de él.

-Yuto kun… ¿Hoy me acompañarás a casa verdad?-colgado del brazo de su pelinegro amigo, Yuri chinen aprovechaba el tiempo en coquetearle y mandarle miradas tiernas para que este hiciera lo que quisiese.

-Claro…como siempre-sonrió de oreja a oreja, ruborizándose tenuemente al sentir el beso que de un brinco el menor le brindó-

-Yuto kun es muy lindo conmigo…-soltó el brazo del alto y parándose frente a él,  estiró los bracitos-¿Me abrazas? Quiero un abrazo de mi Yuto kun…-pestañeó con coquetería mientras sostenía un pucherito en los labios de niño tierno, esperando el abrazo que casi de inmediato recibió-

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-Ya cayó otro…-susurró entre dientes, empuñando la mano con fuerza hasta que pudo soltar un suspiro con pesadez y frustración observando como la parejita se iba agarrada de la mano felizmente-Así que ahora es Yuto….nunca cambias Yuri…

Recargado en un poste de luz, esperó pacientemente las 5 horas que tardó la “nueva víctima” salir de la casa del más pequeño.

-¿Un besito final? ¡Já! que estúpido!¿en verdad cree que lo tomó enserio?-soltó una carcajada observando la silueta de los muchachos que salían de la casa, solo pudiendo disimularlo con el desvió de su mirada- no sabe que es solo uno de tantos para Yuri, solo eso..-balbuceo mordiendo su labio inferior para contener el enojo que sentía al verlos tan juntos-~

Cuando al fin pudo perder a su “amigo” de vista, el menor procedía a cerrar la puerta hasta que escuchó una voz conocida junto a unos pasos acercándose con lentitud…

-Así que… ¿Hoy fue yuto? ¿La próxima semana quién será? –Fue acercándose relajadamente hasta quedar frente a frente al  pequeño, no dejando de hablar en todo momento, solo su voz se fue volviendo más sínica y despreocupada- Ahh seguro Keito…te he visto rondándolo últimamente…

Rodó los ojos con indiferencia y cruzó los brazos para preguntarle-¿Qué haces aquí?¿No te dije que no me interesas? Creí que te había quedado claro Yama Chan… fue una vez y ya. Me satisficiste, lo disfruté, me aburrí y te dejé…Tan sencillo como eso ¿Te cuesta entenderlo o que?-río con burla, casi sabiendo que sus palabras provocarían un gran daño al castaño-.

-Ese es tu lema ¿verdad?-Llegó hasta él y apoyando un antebrazo en el borde de la puerta,  quedo así a escasos centímetros de su rostro, pero sin perder el contacto visual prosiguió-Claro que lo entendí, un año ya de eso…el que no lo entiende eres tú al parecer…-Acerco aún más su rostro hasta rozar su nariz con la suya, inhalando su aroma pero sin perder de vista aquellos ojos que lo desafían y al mismo tiempo se volvían indiferente al tenerlo cerca-

-¿Entender que?-No tembló al mirarlo a tal cercanía, por el contrario sonrió con cinismo y rozó sus labios mientras articulaba palabra por palabra -¿Que eres un idiota que desde que se acostó conmigo esta enamorado de mí y al cuál no pienso hacerle el mínimo de caso? Créeme, eso lo tengo más que claro-con un aparente leve empujo lo separó con brusquedad de él y cerró la puerta en sus narices no sin antes guiñar el ojo y mandarle un beso volado.

-Idiota…-fueron sus últimas palabras de burla dirigiéndose al baño para tomar una ducha después de su agotadora jornada, dejando sin saberlo a un enfurecido Yamada en su puerta.

-Adelante ríe… que al final el que tendrá la razón seré yo…Serás mío nuevamente… -Peinó su cabello con una mano y antes de emprender el camino a casa, volteó el rostro una vez más mandando de regreso otro beso volado.

Dos semanas fue el tiempo que duró su aventura con Yuto, el mayor era bueno en la cama y eso a Yuri lo mantenía satisfecho, durante ese tiempo no había parado de hacerlo día tras día; el baño del colegio, la azotea, el salón de clases, en los arbustos. Cualquier lugar era propio para liberar sus bajos instintos. Él proponía y Yuto obedecía, con solo un beso, una caricia, una indirecta, el mayor se dejaba llevar y tenía sexo desenfrenado con el más bajo; la única diferencia quizás era que cada “Te amo” de Yuto era sincero y cada “Yo también ” de chinen era simplemente calor del momento. El coqueto niño sabía a la perfección que cualquiera al que le dijera Te amo, se excitaría y cedería ante él siempre, así que simplemente lo hacía…solo lo decía y ya.  

-Se terminó…-

Con esas dos palabras llegó a su fin esa “relación”. Yuto lloró y rogó como cada víctima lo hacía siempre con Yuri y este simplemente lo ignoraba o le respondía con un “Me aburriste, lo siento” con suma naturalidad.

-Bien ahora quién sigue… Mmm… Keito o Inoo, Keito o Inoo, Keito o Inoo –Repetía ambos nombres moviendo el dedo índice de un lado a otro mirando al techo de su habitación-Mmm Keito caerá al instante… de echo con un solo beso estoy seguro que lo tendría en mi cama mañana mismo pero Kei…él no será tan fácil y eso me gusta…solo debo de quitar de en medio a ese tal Daiki que no se separa de él, de ahí será sencillo…

Hundido en su encrucijada por ver quién sería el siguiente en compartir su cama, no notó la sombra que en ese momento pasó por su cortina, solo cayó en cuenta de que algo no esta bien cuando las luces comenzaron a parpadear hasta finalmente quedar a oscuras por completo.

-¿Eh? Las luc...-no culminó su interrogante al ser callado por una mano sobre sus labios, todo pasó tan rápido, solo sintió su cuerpo caer en la cama y de inmediato sus manos y piernas quietas, impedidas de movimiento-¡Quién rayos eres!-exclamó forcejeando fuertemente-

-¿Es necesario decir mi nombre?-

Se quedó quieto al escuchar esa voz, era inconfundible. Era él, el idiota que una vez fue su amante como tantos otros pero que siguió persiguiéndolo aún con todos sus rechazos…

-Ryosuke…suéltame-ordenó con tono firme, buscando con los ojos en la oscuridad su presencia.

-No pensarás que te obedeceré ¿o si?-Se sentó al borde de la cama, acariciando con una de sus manos la pierna del menor-Yuri…Yuri….siempre has tenido todo lo que has querido. Sólo ordenas y esperas que te complazcan…

-Claro que sí, es como es…y eso es lo que harás en este preciso instante tú también. Suéltame estúpido-Reordenó.

Un leve movimiento se sintió en aquella cama ¿Qué había pasado? ni el mismo Yuri sabía, solo sintió de pronto una respiración chocar con la suya, unas manos tocar su pecho y seguidamente unos labios apoderarse de los suyos. Brusco y torpe, así sus labios se movían sobre los propios buscando una respuesta que el infantil joven negó en dársela, dejando al castaño hacerlo, pensando quizás que así se cansaría al no obtener respuesta y simplemente lo soltaría. Una mordida en su labio inferior lo hizo soltar los labios y proferir un suspiro, hecho que fue aprovechado por el otro para adentrar su lengua en su cavidad, acorralando de inmediato la del menor para juguetear con ella como quiso. Movimiento tras movimiento…sus salivas se mezclaban en una pelea de lenguas que por mucho el mayor iba ganando y el menor aún sin aceptarlo disfrutando…

“¿Cuándo comenzó a besar tan bien?”

No pudo evitar preguntarse a sí mismo en medio de tan abrumador beso.

-Debes aprender a que no solo tú sabes ordenar Yuri…-susurró sobre sus labios cuando al fin estos se separaron por falta de aire-Tu piel sigue tan suave….-acarició su abdomen con delicadeza, diciendo cada palabra con la mayor ternura que podía...-tan tersa, tan nívea…Tan…hermosa como todo en ti-

Hermosa, exacto...con esa palabra acababa de describir a su anatomía y el menor no pudo evitar sonrojarse de inmediato, agradeciendo infinitamente que estuviera a obscuras, no podía permitirse sonrojarse por un enfermo como ese, no aunque sus caricias lo estuviesen estremeciendo…excitando.

-¿Qué pretendes? ¿Violarme? Ni lo sueñes…yo me acuesto con quien quiero no con quien me quiera follar-Retó al otro que sin poder ser visto por la obscuridad que lo acompañaba esbozó una sonrisa.

-En verdad no entiendes la posición en la que estás ¿verdad?-se quitó de encima suyo y movió el interruptor de luz para que al fin la habitación se iluminara-¿Violarte? No será necesario…acabarás pidiéndome que te haga el amor al final.

-¿Eh?!-No pudo evitar soltar una carcajada sonora al escuchar tal disparate-¿Yo? ¿A ti? Estás loco…-Rodó los ojos y parpadeó para adecuarse a la luz nuevamente, observando de paso como sus manos estaban amarradas a la cama con lo que eran al parecer las corbatas de su padre-Déjate de juegos y ya suéltame. Si quieres tener sexo anda y busca a cualquier ramera de las tantas que hay por ahí, yo estoy ocupado con una nueva presa-Anunció muy tranquilo forcejeando ahora con las piernas que también estaban inmóviles.

-Realmente eres…-suspiró, se acercó nuevamente a la cama, posó sus manos en el zipper del pantalón y cuando al fin estuvo desabrochado lo bajó hasta sus rodillas-Bueno creo que comenzaremos de una vez…-sonrió pícaramente al ser frente a sus ojos y bajó el bóxer a la misma altura que el pantalón-¿Sabes cuántas veces en estos dos años he deseado tocarte?-agachó la cabeza hasta que sus labios hicieron roces con su glande-¿cuántas veces desee lamer esta parte como si de una paleta se tratara?-lamió la punta de la hombría del menor e hizo círculos con su lengua alrededor de esta, relamiéndose los labios para borrar cualquier rastro de saliva-¿Cuántas veces soñé con entrar a esta pequeña parte palpitante?…-acarició con dos de sus dedos su entrada y adentrándolos de golpe hizo gemir al menor sin reparo-¿Cuántas veces desee, penetrarte una y otra vez hasta dejarte exhausto y pidiéndome más?...

Comenzó a gemir, mordiéndose el labio para no hacerlo, ¿pero como diablos no hacerlo? si movía los dedos de tal manera dentro suyo; sus palabras, sus caricias, ambas en conjunto lo hicieron sobreexcitarse. Miró con vergüenza  su entrepierna ya erecta y bien erguida, cerrando los ojos para tratar de controlarse.

-¿Que pasa te estás excitando?-preguntó con un tono de burla en su dejo, sin dejar de penetrarlo con ambos dedos una y otra vez, explorando cada vez más a fondo-Si dejaras de evitar tus gemidos y los dejaras salir lo disfrutarías más…-comentó tocando con uno de sus dedos la excitación del pelinegro, observando con satisfacción sus gestos de dolor y placer reprimido-

-Ahhmm...iee…no te daré el gusto…no…no lo haré…-negaba con la cabeza una y otra vez, forcejeando con ambas manos y moviendo inconscientemente la cadera -No…no lo haré…

-¿Seguro? Porque tu cuerpo dice otra cosa…-dejó caer saliva sobre la punta de su miembro, bajando con dos de sus dedos la piel que cubría al pedazo de carne excitado-es más…si te lo hiciera con la boca te correrías después de unas cuántas succiones...

-Deja de… decir… guarradas…-reclamaba entre jadeos y gemidos intercalados, observando con vergüenza como el castaño jugueteaba con sus dedos como quería con su ingle-Deja de…deja de hacer eso…yo…

-¿Ya quieres correrte?-dejó de acariciar aquella zona dedicándose ahora solo a penetrarlo con un tercer dedo dentro, buscando con ellos su próstata-¿Quieres correrte en mi boca? ¿O con ayuda  de mi mano?-preguntó con sinvergüencería.

-¿Cómo puedes preguntar algo así?¡solo déjame!-exclamó con reproche.

-Bueno si tanto quieres hacerlo solo…-bufó de lado y sin chistar sacó sus dedos de su interior con brusquedad, parándose de inmediato de aquella cama para caminar unos pasos a la puerta.

-A…¿a donde vas?-preguntó con estremecimiento en las piernas y un sonrojo inminente en las mejillas.

-¿A dónde? A tomar un baño supongo, mientras te corres por ti solo…bye~ -hizo un ademán con la mano y cuando giró la perilla para retirarse escuchó un grito del menor.

-¡Espera! tú me… ¿me vas a  dejar así?-

-Ya caí una vez con esa expresión una vez… no lo haré de nuevo pequeño…-alzó una ceja y volvió a girarse para retirarse.

-¡Está bien! Tú ganas…haz…-tartamudeó y con un hilo de voz susurró-házmelo con la boca-

-¿Qué dijiste? ¿Con qué? No escuché…-mintió para volverlo a escuchar.

-¡Con la boca!-enfatizó con un grito sonrojándose hasta las orejas por sus palabras.

-Bueno si me lo pides así…está bien…- dijo con un tono tranquilo, acercándose nuevamente a la cama y subiéndose sobre el menor de inmediato-Lo haré con una condición…-susurró sobre los enrojecidos labios del pelinegro-Tú también házmelo con la boca..

-Ni en tus sueños!-si antes su semblante era rojizo ahora de seguro estaba ardiendo.

-Si no lo haces no hay trato…-

-o...ok…-bajando la mirada afirmó con el rostro.

-Muy bien…ya estás aprendiendo a comportarte…-dejó un beso corto en sus labios y acto seguido, volteó el cuerpo, quedando frente a frente con la entrepierna del menor. La lamió un par de veces y luego dijo-Estoy esperando a que lo hagas para comenzar yo…-

Le lanzó una mirada asesina, acercó el rostro a su pantalón y con un temblor en los dientes, bajó el zipper lamiendo por encima del bóxer abultado esperando sacarle al menos un jadeo al mayor.

-Vamos…creí que eras experto en estas cosas Yu~ri-pronunció estas palabras mientras acariciaba de  punta a base aquel miembro sobreexcitado.

El menor se ofendió, pero era cierto… ¿con cuántos lo había hecho hasta el momento? Más de 10 era seguro, con todos lo hizo de mil y un maneras pero porqué…porqué rayos esta vez se sentía diferente; no por el hecho de estar inmovilizado, las caricias del peli castaño, sus labios, su voz…todo le estaba causando una calentura extrema. Sí, quería sentirlo dentro, quería sentir cómo se sentía el tener sexo con él nuevamente, quería que lo estrechara con sus brazos y lo hiciera gemir como hasta ahora pero no iba a admitirlo, no estaba dispuesto a ceder ante él. Su orgullo se lo impedía.

Así como con el zipper, bajó con los dientes desde el borde el bóxer, dejando salir al prominente miembro de Ryosuke frente a sus ojos. Lo miró y admiró un par de segundos antes de comenzar a lamerlo, estaba tan o más excitado que él, eso lo veía, lo sentía en su lengua al saborear ese líquido pre-seminal que apenas dejaba salir.

 Con lengüetazos y succiones cortas ambos dejaban salir jadeos de sus labios, no faltó mucho para que adentraran dentro de sus bocas sus respectivos miembros, succionándolos apenas tuvieron contacto con sus cavidades. El menor sonrojado y jadeante metía y sacaba el miembro del mayor con repetitividad, disfrutando el tenerlo dentro, sintiéndose complacido a la vez al sentir su miembro siendo cubierto por la cálida boca del castaño. El otro por su parte movía la pelvis para adentrarse más en esa pequeña cavidad que tan buena atención le estaba brindando mientras su boca devoraba a succiones y lamidas la hombría del otro que como él  ya estaba apunto de llegar al orgasmo.

Ambos se “atendieron” el uno al otro como mejor pudieron hacerlo, saboreando y tragándose  hasta la última gota de la esencia que al poco rato desbordaron de sus miembros al llegar al fin al ápice del éxtasis.

Exhausto y jadeante el mayor de ambos se recostó al lado del menor, observando su rostro por un momento mientras recuperaba el aliento…

-Me…-Lo miró de igual forma, perdiéndose por unos instantes en sus ojos cafés oscuros-¿me dejarás ir ya?-dijo volviendo a su tono arrogante de siempre-No puedes tenerme así siempre, ya te hice lo que querías ahora déjame ir…-

-De nuevo con esa actitud…creí que ya te habías tranquilizado…-suspiró con resignación, poniéndose de pie para acomodarse adecuadamente el pantalón-Por hoy te dejaré ir…pero esto no acaba aquí…-desatando brazo por brazo y luego pierna por pierna proseguía-ya te dije, solo te dejaré ir cuanto te adiestre adecuadamente…-robó un beso de sus labios cuando el pelinegro se acariciaba sus muñecas adoloridas y antes de cerrar la puerta para retirarse pronunció- Algún día rogarás por que te haga el amor… lo prometo Yuri…-guiñó el ojo y mandó un beso volado imitando al que había hecho el menor hace unas semanas- Nos vemos~

-Maldito!!!-tiró una almohada a la puerta ahora cerrada, dejándose caer luego en la cama con otra almohada en brazos-Como si dejaría que me vuelvas a tocar, a besar-…rozó sus labios con dos de sus dedos y luego sacudió la cabeza-¡No! Jamás!!No dejaré que me que tengas sexo conmigo y mucho menos me hagas el amor, aunque hayas sido el único en hacerme sentir eso…¡No lo haré!

Mientras Yuri peleaba consigo mismo en una batalla que probablemente el corazón ganaría, Ryosuke caminaba tranquilamente a casa, con una sonrisa de satisfacción y de ¿enamorado?

-Tan niño, tan engreído, tan rebelde. Jugaste conmigo como con tantos otros, nos arrastraste al punto que rogáramos por estar contigo, que te imploráramos por tu amor. Ya llegó el tiempo de cambiar de eso…

El amor y la venganza en conjunto se mezclaban en la cabeza del peli castaño, lo amaba si es cierto, pero aunque aún estuviera loco de amor por Yuri, no lo admitiría frente a sus ojos hasta verlo sublevado a él…hasta darle una lección.

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(Muero de sueño .____. y nose porqué lo subí hoy a las 3am XD pero simplemente sentí que debía subirlo ya...espero les haya gustado almenos un poco...soy feliz con eso :3 )