Dai-chan♥

parejas: Inoo x Daiki
Autora: Mitsue
Genero: yaoi(?xD

El clima cambiante era tan aterrador como siempre, las nubes opacaban el sol que antes atacaba con fuerza, ya se podía ver por las calles personas bien recubiertas por el frio.

Temblando en su asiento, y con las manos cogidas para darse el mayor calor posible, el castaño seguía con plena atención la clase de “análisis”. Todos parecían haber adivinado el cambio brusco de clima que haría, ya que cuando los ojos cafés rodaron por el espacio, distinguió lo bien abrigados que se encontraban sus compañeros, y el ahí, tiritando de frio~

-Kei-chan, mis parciales comenzaron..-pauso su habla, y al no escuchar una respuesta por el teléfono, continuo- Creo que no puedo salir hoy..-

Bien pudo pensar que la línea colapso al no oír respuesta, pero lo que le hacía desechar esa opción era que aun escuchaba el respirar de Kei por la bocina.

-Kei?-

-El clima está loco, no lo crees? –la voz tranquila del pelinegro lo sorprendió-

-Kei-chan, te digo que n..-

-Haz traído abrigo?- interrumpió todo reclamo que pudiera haber, su manera de evadir el tema siempre era única, pero algo más había en el tono de su voz, algo que comenzó a intrigar a Daiki-

-Eh.. Si, justo lo tengo puesto – Mintió con naturalidad, aun cuando sus huesos también sentían fríos-

-Oh, qué bueno. Trajiste la que te regale? –la conversación se volvió más natural, pero aun el tono de voz extraño de Kei no se iba-

-Si, ya sabes que no me gusta que la capucha tenga orejas de conejo, pero igual es muy abrigadora, ahora.. lo que te dije antes – Atasco sus palabra para oír alguna objeción que pudiera hacer su novio, y de nuevo ese silencio aterrador se hizo presente, tan aterrador que juraría, se sentía en la Atlántida.

-Y dime, porque me llamas de teléfono público? –

-Ah, es que me olvide el móvil en el ab..-cayo de golpe en su torpeza, podía al fin recordar que olvido el abrigo junto a su celular en la casa del pelinegro, y que este último supo de su mentira desde el comenzó. “Ayyy…que tonto eres Daiki” se gritó en su interior.

-Porque será que me mientes? –la voz no parecía salir de la bocina, ni que las cálidas manos que rodeaban su cintura fueran una ilusión. Sus cachetes se inflaron, y la cabeza casi podía ser escondida entre los hombros de lo tanto que se achico.

Kei sostenía entre sus brazos al pequeño mentiroso, y este solo se dejaba proteger del frio. Soltó su pequeño cuerpo, y del maletín que   trajo saco el abrigo, las largas orejas sobresalían entre todo el diseño, y antes que Daiki protestara se lo puso sin escuchar sus quejas, acomodo hacia los costados las orejas de conejo, y tiro hacia abajo para tapar por completo su rostro, se inclinó, metió él también la cabeza dentro, robándole un beso de sus labios.

-No hagas eso!, e..estamos en público. –Golpeo su pecho, y lo empujo fuera de sus labios.

Kei sonrió, pudo notar el sonrojo aun cuando Daiki escondía su rostro. Atrapo de nuevo su cintura entre sus brazos, lo abrazo tan fuerte, como siempre quiso hacerlo. Lo amaba, amaba tanto al castaño, que entendía todo, entendía sus palabras, sus sonrojos, su manera de hablar, la mentira detrás de sus palabras..

-Te amo Daiki, ven conmigo. –

-No!, jalaste un curso por mi cul.. No quiero! –

Kei se sorprendió, pensaba que era otro el motivo que hizo rechazar su propuesta, es más juraría que era porque varias veces llego tarde a sus clases por dejar antes a Daiki en su universidad, pero..

“como se enteró?” …

Como buen futuro arquitecto, comenzó a armar y encontrar el lugar que no había sido construido.

“Daiki amigo de Yuto, el flaco lleva una clase conmigo, me estuvo preguntando por los trabajos, lo mande a rodar, uhmm como broma le dije que   repetiría el año..”

-Le mentí – confeso

-Eh? – el castaño no entendía

-Mentí sobre repetir el año, siento celos cuando es insistente y pregunta por ti, a veces solo pare que quisiera saber sobre nosotros, específicamente sobre ti..- aclaro avergonzado, hizo una confesión estúpidamente vergonzosa ante su novio, ayy.. las locuras que haría por Daiki.

El castaño que hasta ese momento mantuvo su cabeza gacha, mostro su rostro anonadado, que luego la cambio por uno sonriente y feliz.

-A dónde iremos? –pregunto

-Ve..Vendrás conmigo? –la voz de sorpresa del alto destaco entre ambos

Aprovecho ese pequeño momento para jalar del pulóver, hizo para atrás su cuello y metió dentro de la capucha a Kei, besos sus labios y contesto    suavemente.

-Si~-